ELABORACIÓN DE LA HIPÓTESIS
La hipótesis es básicamente una AFIRMACIÓN. Es afirmar algo en particular sobre el tema en general que hayan elegido estudiar. Lo ideal es que no sea una frase larga y que esté escrita del modo más sencillo y concreto posible (esto se debe a que, por ejemplo, no es lo mismo investigar del mundo en general o de Argentina en particular, como tampoco es lo mismo hablar de la actualidad en Argentina o de la actualidad en Europa). Esto último significa especificar bien los siguientes puntos:
• de qué estamos hablando
• de cuándo estamos hablando
• de dónde estamos hablando
Si bien el objetivo de todo el trabajo es probar que la hipótesis es verdadera, luego de la investigación la hipótesis puede resultar verdadera o falsa (esto es lo que se debe aclarar en la conclusión).
ELABORACIÓN DE LOS OBJETIVOS ESPECÍFICOS
Los objetivos específicos se piensan antes de comenzar a escribir la monografía y tienen la función de guiarnos en la investigación. Son básicamente un “plan de acción” que se escribe en formato de viñetas donde escribimos uno a uno los propósitos que pretendo realizar para la investigación de mi hipótesis.
Por ejemplo: si mi hipótesis es “Las consecuencias climatológicas del efecto invernadero tienen mayor repercusión en América del sur que en América del norte”. Algunos de mis objetivos específicos pueden ser:
• Detallar qué caracteriza al Efecto Invernadero
• Investigar qué países componen América del sur
• Investigar qué países componen América del norte
• Recopilar estadísticas actualizadas sobre las consecuencias de los desórdenes ecológicos de cada uno de los países de América.
Si bien no hay una “cantidad obligatoria” de objetivos específicos, lo ideal es no superar los diez (para así poder realizarlos a todos). A su vez, durante la investigación, algunos de estos objetivos específicos pueden modificarse, eliminarse o incluso agregarse nuevos.
PROCESAMIENTO Y ORGANIZACIÓN DE CONTENIDOS
La investigación tiene la meta principal de concretar cada uno de los objetivos específicos determinados anteriormente. Una vez recopilada tal información se decidirá si agregar algún objetivo más o si detener allí el proceso de investigación (esto depende si consideramos que ya hemos logrado conseguir toda la información deseada o no).
Una vez realizada esta primera etapa, es preciso recapitular las informaciones recogidas y las ideas descubiertas sobre el tema que se ha investigado: así es como se pasa a la etapa de organización de contenidos, donde procesaremos toda la información recopilada y decidiremos cómo disponerla en nuestra monografía.
REDACCIÓN DE LA MONOGRAFÍA.
La redacción de la monografía es básicamente el momento de dar forma escrita a las ideas obtenidas luego de la investigación. La redacción de la monografía debe ser de estilo formal y exclusivamente personal: si bien están permitidas las citas de libros o artículos (gráficos o web), la monografía no puede ser una copia directa de lo encontrado en los libros o investigaciones ajenas.
Toda monografía debe contener las siguientes partes y expuestas en el siguiente orden:
• Carátula/Portada
• Índice General
• Introducción con la Hipótesis que incluya un Abstract (breve pero exhaustivo resumen sobre la investigación realizada)
• Cuerpo/Desarrollo organizado en Títulos y Subtítulos
• Conclusión
• Bibliografía Consultada
* Anexo/Apéndice (opcional)/ Índice de tablas y figuras (en caso de haberlas)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario